viernes, 31 de mayo de 2013

SANTA CECILIA - SANTA ENGRACIA DEL JUBERA, La Rioja


Vista de Santa Cecilia desde el Camino a Bucesta



A pesar de su apariencia, Santa Cecilia no es un pueblo deshabitado, allí me encontré a la señora Lucia y su hijo, los únicos habitantes de este pueblo.

A excepción de su vivienda, todas las demás estaban en completo abandono




Hasta su iglesia, hoy en día convertida en corral de cabras y lugar en el que guardaban el heno 


Puerta de acceso a la iglesia, si se encuentra todavía en su lugar es debido a que el esposo de la señora Lucia se negó a que se la llevasen. 
Me contaron que un vecino de un pueblo cercano quiso llevársela para ponerla en una bodega de su propiedad, pero ellos se opusieron.


Santa Cecilia está situada a 35,1 kilómetros de Logroño y a 862 metros de altitud


Postigo


Justo en el momento en el que nosotros llegamos a Santa Cecilia, el hijo estaba montado en el coche, esperando a su madre, que se estaba arreglando para bajar a Misa a Ventas Blancas. Fue una suerte ya que así pudimos charlar un ratito con él. 



Me enseñó el corral con un montón de cabras, algunas de ellas muy pequeñas. También estuvimos admirando el paisaje.
 Aunque no la pudimos ver, nos señaló que allá a lo lejos había una ermita, la de Santa Marina. Y también que habían senderos, todos ellos marcados con mojones para los aficionados al senderismo.



Pusieron mucho interés en mostrarme los que antes era la escuela del pueblo. Él nos contó que no tuve tanta suerte, y que le tocaba bajar cada día a Murillo de Rioleza. Cuando mi marido le escuchó decir eso se alegró mucho, ya que él de pequeño también vivió en Murillo y allí comenzó a ir a la escuela.
 ¡Qué casualidad! los dos se pusieron a hablar de Don Ramiro, aunque por la diferencia de edad no coincidieron en el colegio, los dos lo tuvieron como maestro. Así que se pusieron a recordar algunas anécdotas de su maestro. 


Otro de sus rincones

Pero aquí no terminan las casualidades. Hablando y hablando, nos dijo que él se había pasado allí la mayor parte de su vida, y que tan solo había salido de allí cuando tuvo que hacer la mili, y que le tocó en Valencia. Al igual que mi marido se sorprendió cuando escucho lo del colegio de Murillo, también lo hice yo, al escuchar Valencia, mi tierra natal. Pero más me sorprendí cuando dijo que la hizo en Manises mi pueblo. 
¡Qué pequeño es el mundo!, allí en ese pueblo tan pequeño, nos encontramos tres personas, que aunque nunca antes nos habíamos visto, en nuestras vidas hemos compartido cosas.


No sé cuanto tiempo continuarán madre e hijo viviendo en Santa Cecilia, se que en el 2010 eran tres sus habitantes. Seguro que si les hubiese hecho esa pregunta, me hubiesen dicho. "Mientras el cuerpo aguante aquí nos quedaremos". 

Y con esta llave cerramos nuestra visita a Santa Cecilia.

Menos mal que al despedirnos, a mi marido se le ocurrió decirles que nos íbamos a Santa Engracia de Jubera  por el camino que tenía marcado en el plano. Él se quedó extrañado, ya que desde allí no salía ningún camino hacia ese pueblo. Resulta que lo que mi marido había marcado como un camino, era un cortafuegos, estoy segura que de no haber dicho nada, por el cortafuegos que me hubiese llevado, y no sé cómo hubiésemos acabado.

El comentario que viene a continuación es de un familiar de algunos de los últimos vecinos que tuvo Santa Cecilia, y como me ha parecido muy interesante la información que nos da sobre este pueblo, la incluyo aquí.
Muchas gracias 



Personalmente creo que la despoblación del pueblo se debe a varias causas: 
- La orografía del terreno impedía el empleo de maquinaria agrícola; 
- La inexistencia de vías de comunicación con Santa Engracia que hubiera permitido el transporte de personas y mercancías con vehículos a motor; 
- Las huertas eran pocas y muy alejadas del pueblo, en el paraje "La Rueda" en el margen izquierdo del río al que se accede por un camino estrecho y empinado sólo apto para caballerías y personas. 
- El pueblo sólo disponía de agua potable gracias a un manantial que si bien en invierno podía ser suficiente, en verano reducía enormemente su caudal hasta quedar un hilo de agua (es fácil imaginar las consecuencias de esto sobre el inexistente sistema sanitario del pueblo). 
- No había energía eléctrica.
En resumen, la economía era de pura subsistencia siendo las tierras incapaces de producir bienes para toda la población. El pueblo sufrió una regresión enorme. En particular los últimos de mi familia que quedaron en el pueblo eran dos primos de mi madre que en los años 80 emigraron a Logroño. En el pueblo sólo quedó una familia, la de Emiliano y su mujer Lucía con sus hijos. Todos estos últimos pobladores se dedicaron a la ganadería.

Dicho todo esto, yo me pregunto con desesperación cual será la causa de que en este pueblo ninguno de sus antiguos moradores hayan decidido rehabilitar su casa para utilizarla como 2ª residencia vacacional o de fin de semana, a diferencia de otros pueblos de la zona (Cenzano, El Collado, y algún otro....), siendo como es un nieto de la familia de la única actual pobladora el Alcalde de Santa Engracia, municipio al que pertenece Santa Cecilia. ¿ Serán quizá las mismas causas descritas ? Puede ser, pero hoy se podrían acometer soluciones que en aquellos años eran impensables.

Bueno, no me extiendo mas por el momento. Un saludo a todos. 

  











jueves, 30 de mayo de 2013

BUCESTA - SANTA ENGRACIA DE JUBERA, La Rioja

Dejamos atrás Zenzano y nos dirigimos a Bucesta, otro de los despoblados de La Rioja. En el mapa que mi marido había preparado, ponía que teníamos que circular 2,8 kilómetros por el camino conocido con el nombre de Camino de Ribafrecha al S. y, justo en ese mismo punto veríamos un camino que nos llevaría a Bucesta. 
Menos mal que llevábamos el mapa con los kilómetros exactos, ya que la mayoría de veces hemos ido perdidos buscando caminos. Desde que se le ocurrió esta idea, no hemos tenido ningún problema, poníamos el cuenta kilómetros a 0 y en en esos kilómetros exactos, nos aparecía el camino. Así, que por el camino conocido con el nombre de Camino de Bucesta nos metimos.


Estas vacas nos dieron la bienvenida, al verlas pensé que me encontraría con alguno de sus vecinos.


Pero no fue así, ya que ningún alma vimos caminando por lo que antes eran sus calles 



Bucesta pertenece a Santa Engracia de Jubera, en la comarca de Logroño, y dista de su capital Logroño 39,5 kilómetros



Este era el tercer pueblo que recorríamos esa mañana, y tengo que decir que me extrañó el hecho de que hubiesen pueblos en estas condiciones y tan cerca de Logroño. Pensaba que sólo se veían por el Camero. 



Doy por hecho de que al menos el pastor si que vive allí. Esta casa tenía placas solares, y también vi un cable de teléfono que entraba por la ventana de otra de sus viviendas. Aunque la sensación que a mi me dio Bucesta era de un pueblo abandonado.



Casa derruidas y maleza creciendo por doquier

Casa en ruinas







miércoles, 29 de mayo de 2013

ZENZANO - LAGUNILLA DE JUBERA, La Rioja

Después de visitar el despoblado de Villanueva de San Prudencio, nos dirigimos a Zenzano, nuestro siguiente destino.



Un poco antes de llegar paramos para tomar una imágenes de este entrañable pueblo, que ha tenido la suerte de tener unos vecinos que lo quieren mucho. Y digo esto, ya que no hace mucho, Zenzano fue uno de los despoblados de La Rioja.

Por desgracia tuvimos un día muy frío y con mucha niebla


Hasta el año 1975, Zenzano tuvo ayuntamiento propio. 



Al quedarse despoblado se unió al pueblo de Lagunilla de Jubera, pueblo que pertenece a la comarca de Logroño.



Pero como os comentaba, algunos de sus vecinos decidieron arreglar sus casas y volvieron a vivir en él. 


Como este vecino que me mostró lo que antes era un corral de vacas, ahora rehabilitado y convertido en vivienda. Bueno, lo que creo es, que antes tenían a los animales en la misma casa. No quiero decir que viviesen juntos, ellos vivían en una parte de la casa, y la otra parte la utilizaban para guardar en invierno al ganado.
De hecho le pregunté el por qué de esa ventana "postigo" en la puerta, y me dijo que era para ventilar y también para dejar algo abierto, cuando estaba dentro el ganado. 


No sólo están rehabilitando las viviendas, también sus calles


Aunque creo, que la que no lo tiene muy claro que la rehabiliten es la iglesia. La pobre está en ruinas.


Ruinas de la iglesia de la Asunción del siglo XIII
Con pesar me comentaron que estaban haciendo lo posible para restaurarla, pero por el momento no habían recibido ninguna ayuda. Y también, que algunos de los objetos que en ella había se los habían llevado a Calahorra. Supongo, que con el empeño que le están poniendo, algún día los recuperarán, y conseguirán que las campanas vuelvan a sonar en su campanario.


Sus fiestas se celebran el último fin de semana de julio, en honor a San Mateo. Con degustación de choricillo asado, Misa de Campaña, Comida de Hermandad, y Gran Verbena.
Al día siguiente, y como fin de fiesta, todos juntos limpian el pueblo, y como compensación hay una gran chuletada, para todos los que colaboran en ello. 


Pestillo




Cerca de Zenzano existen tres Dolinas o Torcas, una de ellas con más de cien metros de diámetro. Conocida como "La Hoya la Covaza", ese día no las vi, pero es una de las cosas que me gustaría conocer. Seguro que algún día os la mostraré. 







martes, 28 de mayo de 2013

VILLANUEVA DE SAN PRUDENCIO - LAGUNILLA DE JUBERA, La Rioja


Otra vez más, salí de mi casa con otra nueva ruta, que mi marido había preparado para ese día. 
Como os he comentado otras veces, nunca he sabido con antelación cuál es la ruta que vamos a hacer. Mi marido es el que se encarga de organizarla, lo único que me suele decir es hacia la comarca a la que nos dirigimos. Y esta vez lo que si que sabía, era que nos dirigíamos hacia Ribafrecha, en concreto a Villanueva de San Prudencio, otro de los pueblos deshabitados, de La Rioja.

Después de pasar Ribafrecha cogimos una carretera asfaltada, que no tenía cuneta ni raya en el centro. Circulando por esta carretera que estaba bordeada de almendros, y campos salpicados de amapolas, llegamos hasta una indicación en la que nos anunciaba que Zenzano se encontraba a 6,4 kilómetros.




 No tuvimos ningún problema para llegar a Zenzano ya que estaba bien anunciado. Una vez allí, y sin entrar en el pueblo, continuamos por el mismo camino durante 1,4 kilómetros, el punto exacto en el que teníamos que aparcar nuestro coche. Allí vimos un helipuerto construido con piedras pintadas de blanco.



Y este pequeño embalse, para dar de beber al ganado. 




Villanueva se encontraba a tan solo 0, 61 metros. Desde allí mismo se podían ver los restos de las casas del pueblo, diseminadas por la ladera.


Hubo un tiempo en el que perteneció al municipio de Zenzano, pero en la actualidad pertenece a Lagunilla de Jubera




El pueblo fue despoblado en los años 60 del siglo XX



Sus orígenes están ligados al cercano y también desaparecido Monasterio de San Fructuoso de Pampaneto, que se construyó en el año 891. 
En el año 1032 se cita en la carta de población del rey Sancho III de Navarra con el nombre de Villanova de Pampaneto.
Más tarde, en el año 1048 pasó a manos del Monasterio de San Martín de Albelda, y en el año 1067 pasó junto con el de San Agustín de Nalda "por permuta" a ser propiedad del Monasterio de San Prudencio de Monte Laturce situado en Clavijo, quién le dio su actual nombre.

Ruinas de la iglesia de Nuestra Señora de la Esclavitud. 

Ruinas de la ermita de los Frailes

Tenia entendido que había un horno en una de sus casas, pero me fue imposible encontrarlo. Todas las entradas de las casas estaban cubiertas por las malas hierbas, y la maleza cubría las calles

Desde el sitio en el que habíamos aparcado nuestro coche se veía el pueblo de Zenzano, nuestro siguiente destino.




  

lunes, 27 de mayo de 2013

VILLARROYA - La Rioja

Por la carretera LR-487 que sale de Muro de Aguas, llegamos al cruce con la carretera LR-123, carretera que une los pueblos de Arnedo y Grávalos. Allí mismo estas dos carreteras se cruzan, y la 487, se convierte en la LR-488 que lleva al pueblo de Villarroya.



Lo primero que ve el visitante cuando llega a este peculiar pueblo, situado en las estribaciones de la sierra de Yerga, es la iglesia de San Juan Bautista


Los amigos de Villarroya se han encargado de su restauración



Las fiestas del pueblo se celebran el 24 de junio en honor a San Juan Bautista

Y como la gran mayoría de los pueblos que viven de la agricultura y de la ganadería. También ellos celebran el tercer fin de semana de septiembre Gracias.



Por sus calles vi a todo un clásico




Es un pueblo muy tranquilo, y con una peculiaridad, y es, la de que es, el segundo pueblo de España con menos habitantes.
En los últimos años, cada vez que se celebran las elecciones generales, este pueblo es noticia, debido a que es el primer pueblo en cerrar su mesa electoral. En las últimas, las del 2011, batió su propio récord, al cerrar su mesa electoral a los 3 minutos de su apertura.



Aunque hubo un tiempo en el que eso no sucedía. Su declive comenzó a finales de los años 60, cuando se cerraron sus explotaciones carboníferas.





Una Malva Rosa, asomando por encima del muro 




El pueblo fue fundado por los pastores arnedanos en la Baja Edad media. Hasta el año 1789 fue aldea de Arnedo


Veleta


En la Rioja Baja, a 63 kilómetros de Logroño, 14 de Arnedo y a 925 m. de altitud





Horno Comunal de Villarroya, rehabilitado en el año1995 por A. A. de Villarroya


Vista de Villarroya
 Se dice de esta población, que se encuentra minada, ya que por debajo de sus casas cruzan las galerías de las minas.