Dejamos atrás La Santa y continuamos por el Camino de los Sacres, camino que se ve al fondo, a la derecha de la fotografía y, que nos llevó a Ribalmaguillo, otro de los pueblos deshabitados del Valle del Alto Jubera.
Vista del pueblo de Ribalmaguillo, situado a 1030 metros de altitud
Ribalmaguillo está situado en un lugar privilegiado, y rodeado de mucha vegetación.
Separado del pueblo y en lo alto de una pequeña loma se encuentran las ruinas de la iglesia de Santiago
Interior de su iglesia, algunos de sus objetos se los llevaron al Museo de La Rioja en Logroño
Sentí pena al verla en tal abandono
Calle del pueblo
No pude pasear por ella, y tuve que hacer esta foto a través de una valla que rodea el pueblo. Pensé que lo habían hecho para evitar que las vacas caminasen por sus calles. Aquí si que tuve la sensación de que algunas de sus casas están rehabilitadas, y creo que de vez en cuando sus antiguos vecinos las habitan.
Cerrado a cal y canto, aunque para ello no han utilizado ni la cal ni el canto rodado.
Antiguamente se llamaba Riba el Maguillo, no sé el por qué de este nombre, pero casualmente hace unas semanas un amigo de la Asociación Bonsái Rioja, a la que pertenezco me regaló un Maguillo "manzano silvestre" uno de los árboles que crecen en La Rioja y, enseguida los relacioné. Me hace pensar que a lo mejor por esa zona, habían o hay Maguillos y, "ribazos, maguillos" por qué no.
Como en la gran mayoría de estos pueblos, ellos también vivían de la ganadería
A la entrad del pueblo también están los restos de su antigua ermita dedicada a San Antón
Desde Ribalmaguillo hice esta fotografía del pueblo de La Santa
Te han quedado muy guapas las fotografías de Ribalmaguillo.
ResponderEliminarTranquilidad cien por cien la que se respira en este pueblo. Se ¨escucha¨ perfectamente el silencio.
Mi experiencia de la visita a este pueblo va unida a la que relaté en la anterior entrada de La Santa, con el añadido de que al poco de salir de La Santa por la pista salia un camino en descenso que yo creía que llevaba a Ribalmaguillo, con lo que lo cogí para atajar, pero a mitad de recorrido el camino desapareció entre la vegetación, seguramente en sus tiempos si atajaría hasta Ribalmaguillo, pero por falta de uso se borró, por lo que me toco volver a subir hacia arriba a coger la pista que llevaba a Ribalmaguillo, unos cuatro kilómetros más de caminata extra. Ese día me hice 30 km. andando entre ida y vuelta. Como para olvidarlo.
Digo lo mismo que con La Santa, tengo que volver a este pueblo y hacerle un reportaje en condiciones, que le haga justicia.
Ya espero con curiosidad al que creo que sera el siguiente, porque ese si que no lo conozco.
Saludos.
La pena es que no había nadie, y no pudimos entrar por sus calles
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