Ésta es otra, y la más habitual manera que también tienen para asarlos. La gran mayoría suelen hacerlo en las puertas de sus viviendas, dejando un delicioso aroma a pimiento asado que impregna el ambiente otoñal de estos días.
También he descubierto en las tiendas un artilugio como un cilindro agujereado, en el que se meten los pimientos que se van asando a la vez que lo hacen girar con una manivela. Ese todavía no lo he visto en acción, espero descubrirlo algún día para así poder mostrarlo en el blog.
Otra cosa que también les escucho decir, a la vez que se miran las yemas de los dedos es: "¡cómo tengo los dedos!" se refieren a que los tiene manchados y me imagino que también cansados, debido a que después de asarlos tienen que pelarlos, y embotarlos.
Pero seguro que cuando se los coman, ya no se acordarán del trabajo que les han dado, ya que la diferencia entre los comprados es mucha, yo los he probado y se nota. Aunque soy más practica, y los compro ya pelados.
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Es lo qué másme gusta!! Los pimientos asados, con chorrito de aceite y ajito picado...mmmm! En Calahorra usan el cilindro ese que has mencionado para asarlos.
ResponderEliminarHoy tengo yo pimientos para asar, pero los haré en mi horno. Hace poco fotografié a unas señoras asándolos con el cilindro, ya haré una entrada
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