Monte de San Lorenzo
Hacia Briñas, nos dirigimos en busca de nuestro bocata. El día no era nada claro, y debido a ello no podíamos disfrutar de las tonalidades que el otoño nos deja, en estas fechas. Desafortunadamente, cuando llegamos a nuestro destino, nos dijeron que no tenían pan para hacernos el bocata, así que nos metimos en el coche, y nos fuimos hacia la Bastida y, también estaba cerrado el bar al que solemos ir. Y, en San Vicente de la Sonsierra nos pasó lo mismo (la persiana estaba bajada)
Pero cómo sabíamos que el de Briones si que estaba abierto, pues hasta allí que nos fuimos, y dos sendos bocatas de tortilla con chorizo que nos comimos. Esta vez no lo disfruté mucho, ya que para mi gusto, la tortilla estaba fría.
Reflejos en el Pantano
Desde allí, por los caminos que utilizan los agricultores para ir a sus viñedos, nos dirigimos a Hornos de Moncalvillo
Donde los chopos me regalaron esta gama de colores
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