miércoles, 27 de octubre de 2010

SIGUIENDO LAS HUELLAS DE LOS DINOSAURIOS - Poyales y Navalsaz

Como ya es sabido, en toda la comarca que rodea al pueblo de Enciso en La Rioja, hace muchos años vivieron los dinosaurios y la prueba está, en las Icnitas que han aparecido por toda esa zona. Siempre  quería ir a visitarla ya que tenía interés en ver las huellas que esos grandes reptiles nos dejaron.

Este pasado mes de agosto, después de atravesar el valle de Cidacos, llegamos a Enciso, una vez allí y después de leer los murales que nos mostraban donde se encontraba las icnitas, decidimos tomar la carretera que nos llevaba a Poyales, pensando que allí mismo las podríamos ver. Y, aunque por el camino vimos algunos yacimientos, no nos paramos hasta llegar a Poyales.

Al llegar a Poyales me llevé la sorpresa de que era un pueblo casi abandonado. Y digo casi, ya que al adentrarme en él, descubrí un sendero decorado con flores que nos anunciaba una vivienda " La casa del Valle Encantado" una preciosa casa rural desconectada del mundanal  ruido.


Allí descubrí este bonito rincón.

Inmediatamente apareció la dueña cargando en sus brazos, como si de un niño se tratase, una inmensa tortuga. Se veía que le gustaban los animales, ya que tenía en un pequeño corral, patos gallinas, conejos. Le pregunté si vivía allí todo el tiempo y me dijo que si, que lo hacía todo el año. Le dije que la envidaba por ese bonito lugar.

Ella ha sido la primera persona que se asentó en Poyales a pesar de que no había ningún servicio y que ha sido la que ha ayudado a recuperar esta pequeña aldea riojana tan bonita y tranquila.
No solo vi esa casa, también vi gente trabajando en la reconstrucción de otras viviendas. En la actualidad un promotor de la zona ha adquirido varias casas y las está rehabilitando utilizando los materiales originales que en su mayoría eran de piedra muy irregular y mortero.


Arcada que antaño daba entrada a su iglesia 






Poyales se encuentra en la comarca de Enciso, que perteneció a la jurisdicción de los duques de Medinaceli. en 1842 Poyales se separó del ayuntamiento de Enciso y formó su propio municipio, incluyendo en él las aldeas de Garranzo, Navalsaz y Villar de Enciso.




Una de las pocas puertas que quedaban en la aldea, aquí no puede fotografiar, ni picaportes, manillas y demás accesorios.

El municipio de Poyales se disolvió en el año 1976 y quedó completamente despoblado en los años 60. Hasta el día en que la dueña de "La casa del Valle Encantado" descubrió ese tranquilo lugar y decidió quedarse a vivir allí.
Le pregunté por la huellas de los dinosaurios y me indicó que las más cercanas estaban en Navalsaz.




Al llegar a Navalsaz, otra aldea muy cercana, enseguida descubrimos este yacimiento con una de las huellas más grandes de La Rioja, con 75 cm. de larga. Llamadas huellas Ornitopodas, la altura de la pata de ese enorme animal herbívoro era de 4,20 metros. 



Iglesia y cementerío de Navalsaz, que igual que Poyales en los años 60 quedó completamente despoblado.

Al entrar en Navalsaz, pensando que también era un pueblo abandonado, me llevé la sorpresa de ver un pueblo completamente arreglado, con gente por sus calles y plaza, navalsacenos y sus descendientes jugando en la plaza.




Soportales en la plaza.

Los vecinos de estos pueblos lucharon por recuperar sus raíces y sus casas y, a lo largo de estos años han conseguido lo que para ellos era un sueño "Recuperara sus pueblos" 
Cada familia y trabajando como un colectivo se ocupó de proveer al pueblo de todos los servicios públicos y del entorno del sus pueblos. Los mismos vecinos de Navalsaz, trabajando durante los fines de semana realizaron una traída de agua para uso doméstico desde un manantial situado a 3Km. del pueblo.
Todos trabajaron por un igual en todo lo que hicieron. Entre otras cosas, la construcción de un depósito de 60.000 litros de agua.



Ellos adecentaron todo el pueblo sin recibir ninguna ayuda económica. En la actualidad los vecinos de Navalsaz celebran sus fiestas de Santiago patrón del pueblo, durante esos días sus habitantes tratan de emular las costumbres de sus antepasados.








Caminando por este pequeño pueblo, me topé con esta casa, que en su puerta tenía esta blanca y reluciente cortina, con bordados y decoraciones hechos a mano. ¡Hasta las iniciales de sus propietarios tenía!
Lo que me pregunto es. ¿Cómo una casa, en la que supuestamente entran niños, vecinos, sus gentes y posiblemente hasta el abuelo viniendo de la huerta, puede llegar a tener esta blanca e inmaculada cortina?

martes, 26 de octubre de 2010

EL ÁRBOL - Rioja Alavesa



Este árbol solitario en medio de un campo, lo fotografié durante las vacaciones del verano del 2007, cuando iba recorriendo las carreteras de La Rioja Alavesa.

Fue una de mis fotos favoritas, de hecho me la publicaron en un periódico como la foto del día, y cuando mi amiga Rosario Raro la vio le dedicó este poema.


El Árbol


Dos tonos ocre tejido y verde botella 
que es el verde oliva también
Puede ser varios lugares del mundo 
pero sólo es uno.
Cuando la retina lo captura lo superponemos, 
como una pieza del puzzle 
al lugar de donde creemos que se ha recortado.

domingo, 24 de octubre de 2010

COSAS CURIOSAS EN PUERTAS

Gatera, muy común por estas zonas.

Pequeña manilla, en forma de aro.

Mirilla.

Busto tallado en la madera, posiblemente del Rey Felipe II.

En recuerdo de un vecino.

Los alaveses, ya eran previsores.

Como su nombre indica, ACCESORIO.

Portero automático.

sábado, 23 de octubre de 2010

BALCONES OTOÑALES - Elciego, Álava

Visitamos esta pintoresca villa en la provincia de Álava llamada Elciego, con sus calles engalanadas con banderas ya que se encontraban celebrando sus fiestas y, en donde de sus balcones y ventanas colgaban  estas bonitas flores. 

Ventana enmarcada con sillería de la época.

Ventanuco

Ventanas viejas que se conservan, para recuerdo de lo que en su día fue.

Balcón cubierto.

Contraventana.

Contraventanas con madera de la época, con la que pretendían reducir la infiltración de aire en los días fríos del duro invierno de esa zona.

Surfinias, la reina de los colgantes en verano

Gitanillas bailando al son del viento.

lunes, 18 de octubre de 2010

ELCIEGO - RIOJA ALAVESA

Como ya es costumbre todos los domingos, el pasado 12 de septiembre, también salimos en busca de un pueblo para luego poder mostrároslo. Unas veces ya sabemos de antemano a dónde vamos a ir ese día, pero otras veces lo vamos decidiendo por el camino.

Ese día salimos de Navarrete montados en nuestra moto,  mientras el tiempo nos lo permita ese es nuestro medio de transporte, ya que nos da más libertad, y tenemos menos problema para aparcar.
Después de atravesar Fuenmayor, llegamos a Laguardia atravesando viñedos cargados de uvas y esperando para la próxima vendimia.


Bodega de Santiago Calatrava en Laguardia

En Laguardia, paramos para repostar y al mismo tiempo nos comimos unos deliciosos bocadillos de lomo con pimientos y queso, acompañado de un mostito y por supuesto un cafetito. De pronto me dí cuenta que llegaban muchos autobuses llenos de gente, pregunté y me dijeron que ese día en Laguardia se celebraba el día de La Vendimia.
Retomamos nuestro viaje y llegamos a Elciego, pueblo que se encuentra al sur de la provincia de Álava, delimitado al norte por La Sierra Cantabria y al sur con la Comunidad Autónoma de La Rioja y el río Ebro.



Se dice que el nombre de el pueblo viene de una leyenda en la que un ciego vendió una venta o posada, en la que ahora está asentado el pueblo y de ahí habría tomado el nombre la población.


Desde el casco antiguo de la ciudad, se podía ver esta vista de las nuevas construcciones, en donde el pueblo se va extendiendo. Al fondo, la Sierra Cantabria, cubierta de nubes.


Al llegar al pueblo y, después de aparcar la moto comenzamos a recorrer sus empinadas calles

 Y fotografiando sus casas que en la mayoría están construidas de piedra.


Una de las calles céntricas del pueblo, decorada con banderitas que anunciaban que estaban en fiesta.


 Al pasear por sus calles vimos que la mayoría de de sus casas estaban engalanadas 


No solo sus casas también el Ayuntamiento lo estaba, dicho edificio está en el mismo centro del pueblo, en La Plaza Mayor que se empezó a construir en el S. XVIII . El Ayuntamiento tiene su propio escudo regalo del rey Felipe II.
También por esa época se empezó a construir la ermita de la Virgen de La Plaza, toda la plaza estaba decorada con banderas y habían montado un pequeño mercadillo en el que se vendían entre otras cosas antiguüedades.
Nos dimos cuenta de que eran fiestas, los músicos de una orquesta estaban recogiendo todo ya que supuestamente la noche anterior se celebró una verbena. También los de la limpieza estaban limpiándolo todo y dejándolo listo para la siguiente actividad.
Las fiestas el Elciego comienzan con la bajada del Barrihuelo, un muñeco vestido con el traje típico vasco, que desciende de la ermita de La Plaza y es sentado en un sillón del salón de Plenos en el Ayuntamiento, que se encuentra enfrente de dicha ermita.

 Un bonito rincón del pueblo

Casona  
Entre los tejados de Elciego


 Bodega de Marques de Riscal que fue fundada en 1860. Muchos turistas hoy en día acuden a Elciego a visitarla, ya que últimamente ha sido reformada por el prestigioso arquitecto Frank Gehry. 


El vino es el principal sistema socioeconómico ya que todo gira al rededor de él, con sus bodegas y el turismo que suele visitarlas.



Cuando ya estábamos a punto de abandonar el pueblo, una orquesta llegó a la plaza tocando canciones típicas de la región.


De regreso a casa paramos para hacer esta bonita foto del pueblo de Elciego.




Se dice que el nombre de el pueblo, viene de una leyenda, en la que un señor que era ciego, vendió una venta o posada en donde ahora está el pueblo. Pero hay otros que no lo creen, ya que el primer testimonio escrito sobre Elciego, se encontró en el año 1067 en el Cartulario de San Millán de la Cogolla.


Cerradura tallada en la madera.





El herrero que la diseñó, se inspiró mirando el escudo de dicho pueblo. Elciego adoptó las armas de Felipe II de España al recibir el título de Villa en 1583.


Cerradura y su llave





Redondo y sobresaliente en una de las calles de una ciudad de gran prestigio vitivinícola en el País Vasco, llamado Elciego.




Alargado y retorcido en su extremo por las manos del herrero.




Esta puerta tiene de todo. Maneta alargada, cerradura de antaño, otra transformada a nuestros días y su llamador, que golpea sobre un clavo.

Decorando dicha puerta, manilla y clavos en forma de rombo