COLLAR ISABELINO PARA GATOS

 Como ya es sabido por todos los que tenemos gatos, nada más que llega la primavera, y sobre todo en el mes de julio, las gatas se ponen, o tienen el celo, y los gatos van desesperado, y peleándose entre ellos para ver quién se aparea con ellas. Pues este año, Blanco comenzó a desaparecer de casa casi todos los fines de semana, yo de cachondeo le decía a mi vecina,  "sábado sabadete, camisa nueva y un polvete”.

 Lo decía ya que casualmente siempre era así, desaparecía unos  días, venía el sábado por la mañana, comía, dormía un poco, y se volvía a marchar. En una de esas salidas, estuvo nueve días sin aparecer por casa, ya pensamos lo peor, y hasta mirábamos por la calle por si le habían atropellado. Pero no, de repente apareció, todo sucio y con una herida tremenda en el cuello. Tuve la suerte de que lo pude coger, le curé, le desinfecté todo, pero cuando intentaba volverlo a coger para curarle me era imposible. Es un gato muy bueno, pero siempre me ha sido muy difícil poderle coger.

La culpa es mía ya que cuando apareció por primera vez en casa, iba detrás de él con la escoba chillándole para que se fuese, y como no lo conseguí y me hacía tanta gracia, pues al final se quedó en el jardín, junto con Botitas y Zapirón.

Collar Isabelino

El problema ha estado en que cada vez que veía que estaba mejor y que ya casi no quedaba nada de herida, me confiaba, y zas, él en un momento con sus uñas volvía a hacerse más daño. La última vez, que por cierto fue la tercera, (dicen que a la tercera va la vencida), se me ocurrió hacerle este invento, para que no tenga ningún hueco para rascarse.