Hace ya un tiempo os hablé de la desungulación felina, y tengo que deciros que Alba tuvo más suerte que Micifuz, ya que decidimos que a ella no se las quitarían.
Desde el principio estuvimos muy pendiente de ella, y nada más que vi el primer intento de arañar los sofás, me fui a una tienda y le compré este árbol rascador.
No veáis lo que le gustó, nada más verlo se enganchó en él, y tengo que deciros que me sorprendió muchísimo, ya que nadie le había enseñado hacerlo. Estos animalitos son super inteligentes, no como nosotros, que nos lo tiene que enseñar todo.
Y desde entonces todos los días se lima sus uñas en él. Nosotros le animamos un montón y cuando lo hace le decimos "ale, ale, o rasca rasca"
También le suelo cortar las uñas, y lo suelo hacer cuando ella está relajada y dormida. Le cojo la patita y con el cortaúñas de mascotas se las corto, sólo le corto la puntita ya que es peligroso cortarle mucho, pues puede sangrar.
No sólo se rasca las uñas, también juega un montón con él.
Los gatos callejeros no los necesitan, ya que tienen muchos árboles en el exterior para limarse las uñas
El de la foto de arriba era Zapirón, que ya no está con nosotros, y éste es Blanco otro de las dos gatos adoptados que tenemos. En este caso lo están haciendo en dos de mis árboles del jardín, lo malo es que los pobres (me refiero a los troncos) estaban sufriendo mucho, por eso he decidido protegerlos con una malla metálica. En el jardín hay mucho espacio para que se las limen.
Blanco afilando sus uñas en el árbol rascador
A pesar de que Blanco es un gato callejero y tiene árboles en el jardín, también le encanta este árbol rascador
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